El Hombre de los Mil Caminos, mi Viejo, a tu memoria...

"Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; se el nombre de Jehová bendito. Bendito sea el nombre de Jehová, es el que te corona de favores y misericordias de modo que te rejuvenezcas como el águila, el da fuerzas al que no tiene ninguna, y su palabra me sustenta. Gracias te doy, padre bueno, padre santo, porque para siempre es tu misericordia".

El 25 de mayo del 2013, enterramos a mi padre, hombre luchador hasta su muerte, hombre de los mil caminos, hombre de palabra, bebedor y mujeriego, trabajador y amigo, pero amigo de verdad, hombre de convicción en cada acto, decidido en sus acciones, calculador y anticipado, duerme a sus 62 años, disfrutados a su manera, vivió como quiso vivir, recuerdo que me dijo: no necesito nada, no me hace falta nada, tajante y seguro de su palabra, fiel a sus costumbres, sus parrandas y sus amigos. Lo mas sagrado eran sus padres y sus hijos, quienes estuvieron con el hasta mas allá de su muerte.

Jorge Luis Valera, revolucionario hasta el cansancio, su pensamiento de igualdad y justicia, solidario y muy generoso, desinteresado por las cosas materiales y una fe profunda. "Estoy bien" decía; seguro y confiado, "no tengo nada, no me duele nada", tenia una grandeza de animo en medio de la adversidad, mantuvo su temple y su valentía hasta el final, puedo decir que murió con las botas puestas, luchando por vivir, dando ejemplo de lucha hasta mas allá de nuestras propias fuerzas, ese era mi padre, ese era mi viejo, mi viejo amigo, llevo tu coraje, tu valentía, tu temple, tu amor, y tu generosidad. 

Tu amistad genuina para con los tuyos y rechazo contra los hipócritas, falsos, mentirosos, ladrones y chismosos, no toleraste nunca la mentira, ni la hipocresía, ese eras tu y así te recordamos por siempre, hasta la victoria siempre...

Tres en uno

Naciste el 23 y te fuiste el 24, era el mes cuatro cuando llegaste y te fuiste en el mes cinco, a  las 5:35 diste tu ultimo suspiro, adiós nos dijiste con la mirada, adiós mis hijos, los quiero mucho, los estaré cuidando desde el mas allá, gracias por todo lo que hicieron hasta el final, no fue su culpa, no entendíamos lo que pasaba, pero tenia que ser así, ya yo lo sabia y ustedes también, solo que despedirse no es fácil, seis años y siete días para despedirme, despidiéndome poco a poco, sin saberlo, " yo no me quería ir todavía, pero tenia que ser hacer así, ya había llegado mi hora, yo era el numero siete, ya me tocaba, y a todos nos toca de diferentes maneras y momentos, recuerda: "siete veces cae el justo y siete veces será levantado"

111. Me asignaron como deportista de siempre...tu, el y yo, somos uno, un solo numero, 1,1,1, tres en uno. ¡ah vichito!...Mis tres tópias de mi corazón, mis tres mujeres, mis hijos e hijas, mis tres caminos...